Tras conectar a la red eléctrica la instalación solar del Muelle Príncipe Felipe del Puerto de Valencia en periodo de pruebas en diciembre, la infraestructura está funcionando a pleno rendimiento desde el mes de enero, suministrando una media del 3,5% de la energía que consume el recinto. El proyecto se enmarca en el plan de descarbonización de la Autoridad Portuaria de València (APV) que contempla para los próximos años un puerto neutro en emisiones. En concreto, el 1 de enero vertió a la red eléctrica cerca del 100% de la energía que precisó el puerto para su funcionamiento.
La instalación fotovoltaica cuenta con una potencia instalada de 1.039 kWp y generará 2.297 MWh/año. En total, la instalación está compuesta por 2.290 módulos fotovoltaicos que ocupan una superficie de 6.420 metros cuadrados distribuidos en 850 metros lineales de estructura. Los paneles solares cuentan con una pendiente del 30% para realizar el aprovechamiento óptimo del sol.
A la planta fotovoltaica en el espaldón del Club Náutico y sobre el dique Príncipe Felipe se sumará en breve otro parque solar sobre el techo del almacén para vehículos de Valencia Terminal Europa. Entre ambas instalaciones se producirá el 22% de la energía eléctrica que precisa el recinto. Ambos proyectos cuentan con financiación de los fondos Next Generation de la Unión Europea y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
También está proyectada en breve la puesta en marcha de la instalación de otra planta de energía solar en el tinglado 4 del Puerto de Gandía. También se ha anunciado que ya se están buscando nuevas localizaciones para otros proyectos de energía solar.
Plan de descarbonización del Puerto de Valencia
El plan desarrollado por la APV para convertirse en un puerto 100% verde contempla otras iniciativas relacionadas con el uso de fuentes de energía renovable, además de la ampliación de las conexiones ferroviarias, la construcción de dos subestaciones eléctricas para permitir conectar los motores de los barcos que atraquen en el recinto valenciano a la red eléctrica o el uso del hidrógeno en la actividad portuaria.
Este plan de descarbonización contribuirá al objetivo estratégico de convertirse en un puerto neutro de emisiones en los próximos años.