El Consorcio de Aguas de Tarragona incorpora dos plantas fotovoltaicas de 4,7 MWp

Paneles solares del Consorcio de Aguas de Tarragona.

El Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT) dispondrá de dos plantas fotovoltaicas situadas en sus instalaciones centrales en Constantí y en la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) en L’Ampolla. Las instalaciones fotovoltaicas contarán con una extensión aproximada de cinco campos de fútbol y poseerá 8.569 paneles solares y una potencia de 4,7 MWp.

La planta fotovoltaica de las oficinas centrales del Consorcio de Aguas de Tarragona cubre el 17,7% del consumo energético de las instalaciones.

Este mes se pondrá en marcha el primero de los dos parques fotovoltaicos en las oficinas centrales en Constantí. Allí ya se han instalado 1.902 paneles solares que proveerán un 17,7% del consumo energético de este equipamiento. Concretamente, los casi 2.000 paneles fotovoltaicos que suman ambas plantas solares generarán 1.610 MWh anuales de energía limpia y renovable, una producción equivalente al consumo medio anual de unos 340 hogares.

Con la energía producida en esta primera fase se evitará la emisión a la atmósfera de 400 toneladas de CO₂ anuales. Si bien estas dos instalaciones fotovoltaicas proporcionarán cerca de un 10% de la energía que requieren las instalaciones del consorcio, el objetivo de la entidad es alcanzar el 15% de energía verde autogenerada para 2026.

El CAT no tendrá que hacer ninguna inversión inicial, dado que será Endesa X quien asumirá la inversión global de 5,6 millones de euros para la instalación de ambas plantas solares. En esta modalidad de contrato, se establece un precio fijo asociado a la energía producida por las instalaciones de autoconsumo y se estipula que Endesa será la encargada de la construcción, operación y mantenimiento de la infraestructura durante los 10 años de duración del contrato.

Segunda fase del proyecto fotovoltaico

El segundo parque solar en la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de L’Ampolla ya ha comenzado su instalación. Está previsto que la segunda y última fase del proyecto entre en funcionamiento durante el último trimestre del año.

Este proyecto de energías renovables contribuye a la reducción de la huella de carbono de las infraestructuras del Consorcio de Aguas de Tarragona. Así, el CAT ha conseguido reducir en casi un 10% las emisiones de CO₂ durante 2023 respecto al año anterior.

 
 
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