Con un presupuesto de de 6,8 millones de dólares y tras más de una década de investigación, la Organización de Investigación Científica e Industrial de la Commonwealth en Australia (CSIRO, por sus siglas en inglés) ha abierto una nueva instalación en Clayton, Victoria (Australia) dedicada a la escalabilidad de su tecnología solar flexible impresa. El objetivo es ayudar a satisfacer la creciente demanda de energía renovable en todos los sectores.
Las células solares flexibles de CSIRO están impresas en películas delgadas de plástico, lo que las hace livianas, portátiles y óptimas para diversas aplicaciones. Esta tecnología fotovoltaica impresa es la incorporación más reciente al conjunto de infraestructuras críticas de CSIRO que impulsan la industria de fabricación de energía solar flexible.
A través de la nueva instalación de CSIRO, los socios de la industria pueden acceder tanto a la experiencia de los investigadores como a equipos especializados para mejorar y aplicar la tecnología solar flexible de formas novedosas, según indican los expertos. El objetivo del Grupo de Sistemas de Energía Renovable de CSIRO es que la energía solar flexible impresa sirva como complemento de los paneles solares de silicio. Esta tecnología solar impresa abre la puerta a aplicaciones nuevas para la generación de energía asequible, versátil y sostenible, según afirman los investigadores.
Colaboración para realizar avances en I+D en energía solar
Las células solares de CSIRO se fabrican utilizando perovskita, que se imprime en largos rollos continuos de película flexible. Los múltiples pasos de impresión y laminación se realizan en una única operación continua, lo que reduce significativamente los costes de producción y la inversión inicial necesaria para comenzar. Además, el equipo ha desarrollado un sistema automatizado que puede producir hasta 14.000 células solares de prueba al día para afinar su diseño y rendimiento.
Ahora, CSIRO se encuentra buscando socios para apoyar las tareas de I+D y, en última instancia, llevar esta tecnología al mercado. Los socios industriales tendrán acceso tanto al equipo de última generación de CSIRO, como a su equipo de científicos con experiencia en tecnología solar.
Además de la energía solar flexible impresa, el laboratorio está equipado para explorar otros campos que utilizan materiales imprimibles para tecnologías de baterías e hidrógeno, abriendo las puertas a una gama más amplia de aplicaciones innovadoras. La instalación recibió financiación de la Agencia Australiana de Energía Renovable (ARENA) a través del Centro Australiano de Energía Fotovoltaica Avanzada (ACAP).